Sombras del olvido

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Tú lector, palpitas de vida y de orgullo y de amor como yo, para ti, pues, estos cantos. WALT WHITMAN

Esa cosa oscura que reconozco mía.

WILLIAM SHAKESPEARE

 

Con pasos tibios

busco las pistas perdidas

excavo hondo en la memoria

con otras manos, con otras uñas

con otros ojos fuera de la mirada

ciegamente mirando

en la sima oscura del alma

profunda, estrecha, cercana.

 

Recuerdo con abrupto respeto

mi verdad desfigurada

sin tiempo ni deseo

palabras en silencio

quietas sombras del olvido

en días desvanecidos.

Y con la frescura o la fatiga

de los años pasados

despierta la conciencia

a la sombra ensombrecida.

 

Entre arpegios de luz

surgen los recuerdos

con sus músicas antiguas

sus miradas claras

de mudos silencios

sus gritos largos

y callados secretos

sin máscaras tatuadas

sin postales de nostalgia

sin lástimas ni pretextos

sólo con algo de la verdad

que en su presente tuvieron.

 

En este aprender a mirar

luces ceniza de recuerdos

vienen y se marchan sigilosamente

como seres melancólicos

con el don de la invisibilidad.

Ese instante de olvido

(de amor ausente, de dolor perdido)

esa presencia del ayer

esa resurrección del alma

es un tiempo de la mente

que desdibuja la memoria

entretejiendo distancias.

Ese instante llega

nos alegra, nos hiere

y como la luz

enseguida escapa.

 

En la ilusión de la noche

la lejana cercanía

del falso tiempo detenido

abre a la sombra la conciencia

y con su extraño resplandor

de rocío escarchado

vivifica el corazón.

 

Es ese punto inmóvil, ni de ida ni de vuelta

donde se unen pasado y presente

el que permite ser consciente

de lo que fue y lo que pudo haber sido

aquel tiempo lejano, sepultado

ahora en silencio, ya vacío de sentido.

 

Duele en su claridad ese brillo fugaz

de recuerdo desesperado

que apagó el olvido.

Duele saber que no es el verso

ese punto ciego de la vida lo que brilla

sino la realidad del día que rehusamos aceptar

al despertar del sueño.

 

En el instante estremecido del alba

claudica el eco vago del recuerdo

que sueña gozoso el regreso

la sombra resbala, se desliza

y anuncia su claro peligro de quebranto.

 

Los caminos andados

me hicieron como soy

pero la vida solo es lo que es

lo que está siendo hoy.

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